domingo, 18 de abril de 2010

¿Acto de madurez?

Por Gabriela Camacho

A veces no sabemos decir adiós.

Tapamos las heridas con un “hasta luego” o un “nos vemos pronto”, cuando en el fondo sabemos que la separación es definitiva. Creemos que todo durará eternamente, que no perderemos aquello que tanto queremos, pero no es así. Lo que más amamos desaparece con rapidez, y a veces no nos deja tiempo de despedirnos. A veces no sabemos decir adiós.

Las palabras que lastiman, lo que no queremos decir, todo eso se deja ver; todo antes que un adiós. La mayoría del tiempo es por egoísmo, por rabia, por no dejar que el destino nos gane. Lo importante es que siempre hay una razón que escapa de nosotros, una espina de rosa que sobresale del tallo, una que creíamos cortada. A veces no sabemos decir adiós.

“Si tan sólo ella hubiese esperado”, o “si tan sólo él hubiese entendido”, son excusas para evitar afrontar el futuro inmediato. Una venda traslúcida para ocultar la verdad a nuestros ojos, nada funciona cuando todo terminó. Sólo esa palabra de cierre, que termina un ciclo y quizá comienza otro, si así lo queremos. Después de todo, ¿Eso qué importa? A veces no sabemos decir adiós.

No hay nadie que nos enseñe, simplemente debemos aprender. Existen situaciones que no son para nosotros, oportunidades que no supimos aprovechar y otras que no debimos, es tarde si no sabes dejarlas atrás. Si no eres feliz, ¿Por qué seguir intentándolo de esa forma? Seguramente habrá otras mejores. Despidiéndonos del pasado podemos mirar con ojos limpios el futuro. Pero somos humanos, y a veces no sabemos decir adiós.

Por hoy es mejor una tregua, dar un paso en vez de un salto, y despedirnos de aquello que nos hace daño. Por hoy no vale la pena resistirnos a decir adiós, lo que viene puede ser mejor. Por hoy, dejaremos nuestra naturaleza a un lado, no la necesitamos. Es más sensato decir esa palabra mientras haya tiempo, mientras sirva de algo. A veces no sabemos decir adiós, pero cada vez es más fácil cuando lo has intentado...

4 comentarios:

Victor C. Drax dijo...

"A veces no sabemos decir adiós, pero cada vez es más fácil cuando lo has intentado."

Es cierto.
Feels bad man.

G. dijo...

Pesadamente cierto, gracias Víc ^^

Gabriela Valdivieso dijo...

Wow Gabi, te leí distinta, te leí cercana e íntima, qué grato.

Creo que es difícil de decir porque es difícil de procesar. Siempre es más fácil evadir, dar con acuerdos tácitos y huir por la derecha.

Pero también creo que aunque es a veces una trampa y/o una muestra de cobardía, a veces no es necesario. A veces está de más decir lo consabido. Y a veeeeces es hasta peor hacer palabras cosas muy duras!

Es re difícil, Gabi, pero qué buena reflexión!

G. dijo...

Graaaacias Gaby ^^